Extrajera
Y aquí me encuentro, en otro país conviviendo con personas completamente diferentes a mi, con otras culturas, costumbres, hasta el mismo idioma es ajeno a mi. Y me siento como la misma palabra que dice lo que soy "extranjera".
Cuando uno cree que no hay nada más que lo que solamente ven sus ojos, ignorando todo lo que va mas allá de ellos mismos, acá estoy yo, viviendo esto.
Es darme cuenta que una persona puede tener tantos prejuicios sobre los demás, que al final del día nada es lo que parece, podemos ser tan similares, como diferentes, es ver que hasta en otro país pùeden ser tan discriminadores, ignorantes, irrespetuosos hasta con ellos mismos, donde hasta el mas minimo detalle como una situación en la que no se corren si vos vas caminando en sentido contrario a ellos, cuenta, dónde no existe el perdón.
Pero mas allá de todas las cosas negativas que puedas sacar de un país, acá la vida se podría decir que es mas sencilla, dependiento del punto de vista de cada uno, no viven tan acelerados, de un lado a otro, corriendo porque no tienen tiempo, no es como en la ciudad en la que vivo, dónde todos están estresados, acelerados, por quien sabe qué.
Las personas que menos tienen, que no pueden obtener ciertos beneficios son mas felices que las que lo tienen todo, viven en viviendas donde los vecinos son su propia familia, porque se conocen de toda la vida. Y así crean una comunidad que se basa en la comunicación, en el respeto (dependiendo la situación), y es ahí donde me empiezo a preguntar que estoy haciendo a veces con mi vida, si estoy bien haciendo lo que hago, qué es lo que me conviene realmente, pero a su vez, sé que en un 50% viviría una vida así, pero en el otro 50% estoy feliz con mi vida, aunque tenga que aguantar vivir en una ciudad dónde están todos estresados, porque muchos de los que vivirmos en ciudad no estamos acostumbrados a tener otra vida completamente distinta, aunque no viene mal, probar algo nuevo.
Pueden existir muchos prejuicios en países ajenos a nosotros, pero por mas que convivamos días, semanas, meses, siempre voy a ser eso, una extranjera.
Cuando uno cree que no hay nada más que lo que solamente ven sus ojos, ignorando todo lo que va mas allá de ellos mismos, acá estoy yo, viviendo esto.
Es darme cuenta que una persona puede tener tantos prejuicios sobre los demás, que al final del día nada es lo que parece, podemos ser tan similares, como diferentes, es ver que hasta en otro país pùeden ser tan discriminadores, ignorantes, irrespetuosos hasta con ellos mismos, donde hasta el mas minimo detalle como una situación en la que no se corren si vos vas caminando en sentido contrario a ellos, cuenta, dónde no existe el perdón.
Pero mas allá de todas las cosas negativas que puedas sacar de un país, acá la vida se podría decir que es mas sencilla, dependiento del punto de vista de cada uno, no viven tan acelerados, de un lado a otro, corriendo porque no tienen tiempo, no es como en la ciudad en la que vivo, dónde todos están estresados, acelerados, por quien sabe qué.
Las personas que menos tienen, que no pueden obtener ciertos beneficios son mas felices que las que lo tienen todo, viven en viviendas donde los vecinos son su propia familia, porque se conocen de toda la vida. Y así crean una comunidad que se basa en la comunicación, en el respeto (dependiendo la situación), y es ahí donde me empiezo a preguntar que estoy haciendo a veces con mi vida, si estoy bien haciendo lo que hago, qué es lo que me conviene realmente, pero a su vez, sé que en un 50% viviría una vida así, pero en el otro 50% estoy feliz con mi vida, aunque tenga que aguantar vivir en una ciudad dónde están todos estresados, porque muchos de los que vivirmos en ciudad no estamos acostumbrados a tener otra vida completamente distinta, aunque no viene mal, probar algo nuevo.
Pueden existir muchos prejuicios en países ajenos a nosotros, pero por mas que convivamos días, semanas, meses, siempre voy a ser eso, una extranjera.
Mica, desde Rio de Janeiro, Brasil
22/01/2015



Comentarios
Publicar un comentario